Una mirada psicológica y astrológica
La astrología y la psicología se cruzan de una manera interesante cuando hablamos de los cuatro elementos: Fuego, Tierra, Aire y Agua. Stephen Arroyo, en su libro “Astrología, Psicología y los 4 Elementos”, explica cómo estas energías influyen tanto en nuestra carta natal como en nuestra vida cotidiana.
Cada uno de los elementos representa una fuerza que se refleja en nuestra forma de ser y de vivir:
- El Fuego es la energía que nos da impulso, nos motiva a actuar y nos llena de entusiasmo. También puede hacer que nos apuremos demasiado o actuemos sin pensar.
- La Tierra nos conecta con lo práctico, nos da estabilidad y nos ayuda a construir algo concreto. Pero si está muy presente, puede hacernos demasiado rígidos o apegados a lo material.
- El Aire es lo que nos hace pensar, comunicarnos y compartir ideas. Nos abre a nuevas formas de ver las cosas, aunque a veces puede hacernos dispersos.
- El Agua es pura emoción e intuición. Nos conecta con nuestros sentimientos más profundos y con los de los demás, pero en exceso puede volvernos demasiado sensibles o dependientes.
Lo interesante de los elementos es cómo se combinan entre sí en nuestra vida. Por ejemplo, alguien con mucho Fuego puede ser muy apasionado y tener grandes ideas, pero si le falta Tierra, puede costarle concretar sus proyectos. O una persona con mucha Agua puede ser muy intuitiva, pero si no tiene suficiente Aire, quizás le cueste expresar lo que siente.
La astrología, al mirar cómo están presentes estos elementos en nuestra carta natal, nos da herramientas para entendernos mejor y encontrar más equilibrio. No se trata solo de los signos o planetas, sino de cómo estas energías influyen en lo que sentimos, pensamos y hacemos.
Esto no solo sirve para conocernos a nosotros mismos, sino también para entender a quienes nos rodean. Al observar los elementos en una carta natal, podemos ver cómo una persona vive su vida, cuáles son sus desafíos y dónde tiene más potencial para crecer.
La combinación de astrología y psicología nos ayuda a trabajar con estas energías de una manera práctica y clara. Los elementos no son algo abstracto, son fuerzas que influyen en nuestra vida diaria, y aprender a usarlas a nuestro favor puede ser un gran paso hacia el autoconocimiento.
